Afirma fundador de la CEB San Pablo Apóstol:
Nuestra Semana Santa de hoy es distinta a la de ayer

Afirma fundador de la CEB San Pablo ApóstolNuestra Semana Santa de hoy es distinta a la de ayer

Oscar Robelo

“Nuestra Semana Santa de hoy es distinta a la de ayer, pero sigue siendo nuestra Semana Santa”, sostiene don José Tomás Valdez Rodríguez al explicar la dinámica cambiante y constante de los procesos culturales que desarrolla el pueblo nicaragüense en general y –en este hecho- de la población cristiana en particular.

Para don José Tomás, miembro fundador -junto a su hermano Rafael (qepd)- de la Comunidad Eclesial de Base (CEB) San Pablo Apóstol, las personas cristianas que piensen que la Semana Santa seguiría el curso de los viejos tiempos de castidad social, es desconocer la dinámica que envuelve el hecho cultural del pueblo para sobrevivir y reproducirse.

Como ejemplos mencionó que antes no se podía comer determinados alimentos como la carne, ni oír música que no fuera la sagrada, tampoco trabajar, mucho menos tener actividad sexual. “No podíamos bañarnos en la playa, no se podía clavar en las paredes, estar siempre recluido en casa; eso es negar el desarrollo humano del pueblo que es cambiante y constante, que siempre está en construcción como también la identidad nacional”, resaltó.

Valdez dijo que la celebración religiosa del período de Cuaresma es un hecho histórico después que Jesús entregó su alma al Creador por la redención y salvación de la humanidad, por lo que es importante señalar los elementos que reflejen la celebración de la Cuaresma y la Semana Santa en el país para expresar lo que en realidad siente el pueblo nicaragüense.

Desde el Miércoles de Ceniza, que este año fue el 14 de febrero, inició el período de Cuaresma celebrado por toda la cristiandad: los católicos, los católicos ortodoxos y algunas ramas del protestantismo como los anglicanos y algunas iglesias evangélicas.

Jesús inicia vida pública

“Este período de Cuaresma a los cristianos nos recuerda los 40 días que Jesús pasó en el desierto haciendo oración y penitencia, período que le sirvió, en medio de las tentaciones del demonio, para una preparación según nos dicen los evangelios para empezar una intensa vida pública pronunciando sermones y parábolas mientras realizaba milagros asombrosos”, explicó.

De acuerdo al religioso, la esencia del cristianismo es la Semana Santa, pues es la última semana de la vida de Jesús de Nazaret. “Es la conmemoración cristiana en la que millones de nicaragüenses, en plena libertad de culto, reviven múltiples actos de la pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo”. De ahí que, a su juicio, es el momento de hacer abstinencia, penitencia y de arrepentimiento sincero de los pecados, que logren purificar el alma y el cuerpo.

El fundador de la CEB San Pablo Apóstol de la Colonia 14 de septiembre, dijo que como cristianos de fe en esta Semana Santa encuentran los espacios y tiempos necesarios para dedicarse en familia a la oración y la reflexión en los misterios de la pasión y muerte de Jesús; así como entender y reconocer que su sacrificio en la cruz otorgó la salvación y facilitó la posibilidad de una vida terrenal digna y en paz como la que se vive en Nicaragua.

Gobierno promueve recreación familiar

Vía crucis en las Isletas de Granada.
Vía crucis en las Isletas de Granada.

Al respecto, destacó que durante el período de la Cuaresma y en especial en la Semana Santa, el gobierno sandinista promueve la recreación familiar y la cultura popular, desmintiendo con hechos las informaciones falsas que en Nicaragua hay persecución religiosa; “todo lo contrario”, consideró don José Tomás.

En todos los municipios y poblados del país se celebran, en plena libertad de culto, no sólo las fiestas de sus santos patronos en un ambiente cristiano, sino que todas las tradiciones religiosas y culturales durante la Semana Santa como la procesión de las palmas, los viacrucis, el Santo Entierro, el encuentro de las imágenes entre Jesús Resucitado y la Virgen María.

También la Judea que se celebra en varias ciudades, tradición cultural que consiste en la representación teatral del camino de Jesús hacia el cerro del Calvario y su crucifixión; las carretas peregrinas que celebran al Señor del Rescate de Popoyuapa, el viacrucis en las Isletas de Granada y en San Carlos, Río San Juan; las tradicionales alfombras pasionarias en León y otras ciudades del país como en Managua, los bautizos cristianos en ríos y mares.

Asimismo, la tradición de la Iglesia Morava en Bluefields, otras ciudades y pueblos del Caribe que tienen actividades diferentes a las del Pacífico, siendo la más llamativa la del Domingo Santo de la resurrección de Jesús. Este día, la gente se congrega en los cementerios para asistir a una misa campal y visitar y arreglar las tumbas de los familiares fallecidos.

“Cada una de estas tradiciones culturales del pueblo, celebrando alegremente su fe, reciben el apoyo económico y logístico de los gobiernos municipales que tienen como principio la práctica cristiana”, subrayó el religioso.

Las familias se reúnen

Destacó que es impresionante como el pueblo nicaragüense, desde Managua y otras cabeceras departamentales, se traslada de forma masiva a sus lugares de origen, donde viven sus familias y allí pasan la Semana Santa viviendo con mayor recogimiento espiritual y sano entretenimiento la fiesta religiosa que les acercan a Dios y se reconcilian con el prójimo, obteniendo una mayor paz espiritual y concordia.

Según don José Tomás, el gobierno sandinista, a través de diferentes instituciones, antes de cada Semana Santa trabajan para asegurar el disfrute de los veraneantes en las playas de los mares, lagunas y ríos en ambiente limpio y seguro. Promueve espacios de comercialización a centenares de comerciantes para el disfrute del pueblo de la gastronomía tradicional de Semana Santa, compra de artículos de utilidad en el verano y revistas culturales en el Parque Nacional de Ferias y en las plazas de los municipios.

“Allí pueden degustar sopas de queso, pinol de iguana, pescados, en especial el arroz con gaspar, la curvina empanizada, cusnaca de jocotes y los deliciosos almíbares, tan demandadas en la Semana Santa”, aseguró, para luego hacer un llamado a las familias veraneantes a evitar el excesivo consumo de licor, y a los conductores a no manejar en estado de ebriedad.

Al concluir sostuvo que con todos los demás miembros de la Comunidad Eclesial de Base San Pablo Apóstol, hombres y mujeres siguen firmes en la defensa del evangelio de Jesús, en la defensa de la Revolución, en la defensa del Estado que dirige el comandante Daniel y la compañera Rosario Murillo, porque “ellos representan en realidad lo que es el evangelio de Jesús por los pobres y trabajar por los pobres”.

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